René Loaces es miembro de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en Minas de Matahambre. Durante la etapa revolucionaria formó parte del movimiento 26 de julio en este territorio.
A propósito de la celebración de la jornada por el aniversario 64 aniversario de los Asaltos a los Cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes en Santiago de Cuba Radio Minas conversó con él sobre su accionar durante la liberación definitiva.
Periodista: Cómo llega usted a formar parte del movimiento 26 de julio?
René: Yo era un guajirito oriundo de aquí de Sumidero. En ese entonces había tremenda miseria y me trasladé con un tío mío para Artemisa a trabajar en una bodega, él fracasó y nos regresamos, Más tarde me volvieron a avisar y retorné para trabajar en el centro comercial más grande de Artemisa, ahí me encontraba durante los Asaltos a los Cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes. Esta provincia aportó alrededor de 16 de sus mejores hijos durante la acción.
P: Qué misiones cumplió como parte del grupo?
R: A partir del ataque en Santiago de Cuba inicié la lucha, mi primera acción estuvo relacionada con la venta de bonos por el Teniente Nogueira que le habían disparado y se estaba operando en un hospital en la Habana.
Posteriormente me trasladaron dentro de la misma empresa Comercial Gastronómica de Carvajal y Compañía para Fierro, en el año 1956.
El tiempo transcurrió y en 1957 se fundó el primer frente guerrillero en Pinar del Río comandado por Juan Palacios que operaba entre los entronques de Fierro y Los Palacios a 2 kilómetros de la carretera Central. Ahí me involucré como contacto del grupo con los compañeros Raúl González y Alberto Rey a quienes les llamaban “Cubanitos de Pinar del Río” que después resultaron traidores a la Revolución.
Un tiempo más tarde vuelvo para Sumidero y como ya se habían organizado las células del Movimiento 26 de julio me uní a ellos. Por este lugar pasaron cinco frentes guerrilleros desde el primero de enero de 1958 hasta el triunfo definitivo.
Tuve contacto directo con las principales figuras de la lucha en la zona y colaboré con la preservación de la vida de muchos de ellos escondiéndolos en lugares estratégicos.
P: Pudiera contarnos algunos momentos difíciles por los que pasó dentro de este período revolucionario?
R: Durante esta etapa fueron varios los instantes que pasamos, pero uno particularmente me hizo sentirme atemorizado y fue cuando tuve que salir de Artemisa de forma abrupta porque un compañero da una falsa alarma de que venían a apresarme y en el ómnibus en que viajaba los guardias realizaron una inspección y se le cae a un marinero que iba cerca de mi, unas balas y como no identificaron al dueño me llevaron preso todo el día para el cuartel, entonces me piden quitarme toda la ropa y los zapatos, suerte que no exigieron que me quitara las medias porque debajo del pie llevaba bonos escondidos que me hubieran costado la vida.
Otro momento significativo fue cuando la aviación atacó el grupo y de ahí salió herido Teté Contino al que trasladaron para la casa de Francisco Pérez Germán un líder también minero. Por una delación de un compañero los torturaron como bestias y los dejaron tirados en las lomas de San Cristóbal, resultando de ello la desorganización de esta tropa. Por esa razón surge después el Directorio revolucionario dirigido por Raúl Fonte que operó en la zona hasta el primero de enero de 1959.
P: Qué significado tuvo para usted ser uno de los integrantes de esta organización en este territorio.
R: En aquellos momentos ocurrían muchos abusos y maltratos ejecutados por la guardia rural que fue un ejército creado para garantizar los intereses de los pudientes y donde los ricos eran más ricos y los pobres eran más pobres.
Todo eso me llevó a revelarme contra la dictadura de Fulgencio Batista e hizo que se encendiera la llama en mí, como en otros cubanos desde el Cuartel Moncada hasta las provincias occidentales logrando con ello la huída definitiva del tirano. Eso debe constituir un orgullo para todo revolucionario cubano.
Por: Yudith Ramos Martínez
Periodista de Radio Minas
Contacto: yudith.ramos@rminas.icrt.cu @yudithminas
17 de julio de 2017
